PUNTO 1
El más Noble Profeta (PyB) dijo:
مَنْ تَمَسَّكَ بِسُنَّت۪ى عِنْدَ فَسَادِ اُمَّت۪ى فَلَهُ اَجْرُ مِائَةِ شَه۪يدٍ
Es decir: “Aquel que siga mis prácticas cuando mi comunidad esté corrupta, puede recibir la recompensa de cien mártires”.
Sí, seguir las prácticas del Profeta es ciertamente muy valioso. Y en tiempos cuando las innovaciones prevalecen, seguirlas es aún más valioso. En particular, cuando la comunidad del Profeta esté afectada por la corrupción, cumplir con una pequeña parte de las Prácticas del Profeta es una muestra de una poderosa fe y de temor a Allah. Seguir directamente estas Prácticas, hace recordar al Noble Profeta (PyB), y ese recuerdo se transforma en remembranza de la presencia Divina. Cuando las Prácticas se realizan y se siguen tal cual son, aún en las cuestiones más insignificantes, tales como la forma de comer, beber o dormir, esa acción habitual y natural se convierte en una adoración meritoria y un acto aceptable por la Sharia. Porque a través de esa acción común uno piensa seguir al Noble Profeta (PyB) y cree que es una decencia de la Sharía. Entonces recuerda a Aquel que estableció la Sharía. Y su corazón se vuelve a Allah Todopoderoso, Quien es el verdadero dador de la ley, y obtiene una especie de sentido relacionado con la Presencia Divina y hace una adoración.
Y es por este misterio, aquel que adquiere el hábito de seguir las Prácticas del Profeta (PyB) transforma todos sus hábitos en actos de adoración y hace que toda su vida sea fructífera y obtenga recompensas.
PUNTO 2
Imam-i Rabbani, Ahmad Faruqi (Que Allah esté complacido con él) dijo: “Mientras atravesaba las etapas de mi viaje espiritual, vi, que entre los niveles de los evliyas, los más brillantes, espléndidos, sutiles y sensatos eran aquellos que tomaron las Prácticas del Profeta (PyB) como la base de su camino. Aún los evliyas más comunes de este nivel parecían ser más admirables que aquellos grandiosos que figuraban en otros niveles más elevados”.
Sí, Imam-i Rabbani, el Revitalizador del Segundo Milenio (Que Allah este complacido con él) dice la verdad. Aquel que pone a las Prácticas del Profeta (PyB) como los fundamentos de su vida, bajo la sombra del Amado de Allah (PyB) alcanza el rango de ser amado por Allah.
PUNTO 3
Una vez, este pobre Said estaba tratando de salir del viejo Said, su intelecto y su corazón estaban confundidos entre diversas verdades en una terrible tormenta espiritual que resultaba por la falta de una guía y el orgullo de su alma maligna. Ellos eran zarandeados, subiendo y bajando, a veces desde las Pléyades al suelo y a veces del suelo a las Pléyades.
En ese tiempo observé que como la qibla– brújulas que muestran el curso que deben seguir los barcos-, cada uno de los temas de las Prácticas y aún los puntos más pequeños relativos a la conducta, eran como interruptores eléctricos entre innumerables caminos oscuros y peligrosos. Y cuando, en el tiempo de ese viaje espiritual me ví debajo de una alucinante presión abrumada por verdaderas cargas muy pesadas, seguí las Prácticas que se relacionaban con esa situación y experimenté que todas mis cargas me fueron sacadas y me sentí aliviado. A través de someterme a ellas, fui salvado de las dudas y de los escrúpulos, es decir, de ansiedades tales como: “¿me gustaría saber si es esta una acción correcta, es beneficiosa?”. Cuando retiré mi mano, miré y ví que la presión era muy intensa. Había numerosos caminos, pero no se podía saber adonde conducían. La carga era pesada y yo era muy impotente. Mi visión era corta y el camino, oscuro. Cuando seguí las Prácticas del Profeta (PyB), el camino se iluminó y parecía seguro. Experimenté un estado mental en el cual la carga se hizo liviana y la presión desapareció. Y entonces en ese momento confirmé a través de mis propias observaciones lo que había dicho Imam-i Rabbani.