Cuarta Parte del Apéndice
قَاـلَـ مَنْ يُحْيِى الْعِظَامَ وَهِىَ رَم۪يمٌ ﱳ قُلْ يُحْي۪يهَا الَّذ۪ٓى اَنْشَاَهَٓا
اَوَّـلَـ مَرَّةٍ[1
ﮈوَهُوَ بِكُــلِّ خَلْقٍ عَل۪يمٌﮋ ﱳ
El ser humano dice: “¿Quién dará vida a los huesos cuando ya estén carcomidos?” tú, di; “Les dará vida Quien los originó por primera vez“
Como ilustramos en la tercera comparación de la Novena Verdad de la Palabra Diez, un personaje puede en un día reunir ante tus ojos un gran ejército. Si alguien dijera: “Ese personaje, con un toque de trompeta puede reunir las tropas de su ejército, que fueron enviadas a descansar, y los congrega nuevamente en batallones”, y si dijeras: “Yo no lo creo”, sabes bien qué lunática sería tu negación. ,
Entonces también, un Ser Todopoderoso y Omnisapiente Que de la nada grabara y pusiera en su lugar, bajo la orden de: كُنْفَيَكُونُ “¡Se!”, y es, todas las partículas y los aspectos sutiles de los cuerpos de todos los animales y otros seres vivos, como si fueran un ejército con el más absoluto orden y sabio equilibrio, y Quien crea cada siglo, o más bien cada primavera, los cientos de miles de diferentes especies y grupos de seres vivos que pueblan la faz de la tierra, cada uno como un ejército; semejante Ser puede reunir, con un soplo en la trompeta de Israfil, todas las partículas fundamentales y componentes originales que disfrutan de una relación mutua a través de la sumisión unida al orden del cuerpo que corresponde a un batallón. Si dijeras: “¿Cómo puede ser esto?”, o lo consideraras alejado de la razón, sería una locura idiota.
A veces sucede en el Corán que, para recalcar en el corazón las maravillosas obras que Él realizará en el Más Allá y para preparar la mente para que las acepte, Allah Todopoderoso menciona las maravillosas obras que Él realiza en este mundo como una especie de preparación. Si no, Él puede mencionar a veces las obras maravillosas que Él realizará en el futuro y en el Más Allá de tal manera que nos convenzamos de ellas por la analogía con las obras similares que observamos en este mundo. Un ejemplo está proporcionado por la aleya, y las aleyas que quedan hasta el final de la misma sura. El Sabio Corán así demuestra la pregunta de la resurrección de siete u ocho formas diferentes.
اَوَلَمْ يَرَ الْاِنْسَانُ اَنَّاخَلَقْنَاهُ مِنْ نُطْفَةٍ فَاِذَا هُوَخَص۪يمٌ مُب۪ـينﭱ
[1] Corán, 36:78-79
Primero dirige la atención del ser humano a su propio origen. Dice “ves cómo has avanzado de una gota de esperma a una gota de sangre, de una gota de sangre a un trozo de carne sin forma, y del trozo de carne sin forma a la forma humana. ¿Cómo entonces puedes negar tu segunda creación? La segunda creación es similar a la primera o más fácil”. Allah Todopoderoso también se refiere a las grandes bendiciones que Él le ha otorgado al ser humano con frases como:
اَلَّذ۪ـيـ جَعَلَ لَكُــمْ مِنَ الشَّجَرِ الْاَخْضَرِ نَارًا[1] Y le dice al ser humano: “¿Así que el Ser Que te otorgó una generosidad te abandonará a tus propios medios, de tal modo que entres a la tumba para dormir sin levantarte otra vez?”
Él también da a entender lo siguiente: “Vean que los árboles muertos vienen a la vida y crecen verdes otra vez. No podéis compararlos con la reanimación de los huesos como leños, ni verlos alejados de la razón. Ahora, ¿es acaso posible que Quien crea los cielos y la tierra no tenga el poder sobre la vida y la muerte del ser humano, el fruto del cielo y de la tierra? ¿Creéis que Él haría el árbol de la creación sin frutos y en vano que Él ha moldeado con sabiduría en todas sus partes, al abandonar el resultado supremo de ese árbol?”
El Corán además dice: “El Ser Que te regresará a la vida en la resurrección es tal que todo el cosmos es como un soldado obediente Suyo. Inclina su cabeza sumisamente cada vez que escucha la orden:
كُــنْ فَيَكُونُ “¡Se! Y es”. Crear la primavera es tan fácil para Él como la creación de una flor. Crear todo el reino animal es tan fácil para Su poder como crear una mosca. Nada puede de modo denigrante desafiar Su poder al decirle: [2] مَنْ يُحْيِى الْعِظَامَ Luego, de la aleya:
[3]فَسُبْحَانَ الَّذ۪ى بِيَدِه۪ مَلَكُوتُ كُلِّ شَىْءٍ vemos que el índice de todas las cosas está en Su mano, la llave de todas las cosas está en Su posesión; Él rota la noche y el día, el invierno y el verano, con tanta facilidad como si estuviera pasando las páginas de un libro. Él es un Ser Todopoderoso y Glorioso Que cierra la puerta en este mundo y la abre en el Más Allá como si fueran dos estaciones. Al ser este el caso, como resultado de las evidencias mencionadas:
وَاِلَيْهِ تُرْجَعُونَ [4] Es decir, Él nos regresará a la vida desde nuestras tumbas, nos llevará a la llanura de la resurrección, y nos juzgará en Su presencia majestuosa.
Ahora estas aleyas preparan la mente y preparan el corazón para aceptar la realidad de la resurrección, porque han demostrado paralelismos para la resurrección en los procesos mundanales.
A veces también pasa que Él menciona las obras que Él realizará en el Más Allá de tal modo que llama la atención hacia sus paralelismos mundanales, para que no quede ningún lugar para la duda y la negación. Los ejemplos son las suras que comienzan con estas aleyas: اِذَا الشَّمْسُ كُوِّرَتْ ﱳ اِذَا السَّمَٓاءُ انْفَطَرَتْ ﱳ اِذَا السَّمَٓاءُ انْشَقَّتْ[5] En estas suras, Allah Todopoderoso menciona la resurrección y las revoluciones vastas y las obras divinas que se llevarán a cabo en ese momento, de tal manera que el ser humano piense en sus paralelismos mundanales que ha visto en el otoño y en la primavera, y luego, con asombro en su corazón, acepte fácilmente lo que el intelecto de otro modo rechazaría. Incluso para indicar el significado general de las tres suras recién mencionadas tomaría mucho tiempo. Entonces, tomemos simplemente una palabra como muestra de todo. Con estas palabras:
اِذَا الصُّحُفُ نُشِرَـتْـ[6] Allah Todopoderoso expresa lo siguiente: “El día de la resurrección, las obras de todos serán reveladas en una página escrita.” Esto parece muy extraño, y completamente más allá de la razón. Pero como la sura lo indica, tal como la resurrección de la primavera es un paralelismo de otros asuntos, cada planta que florece tiene sus obras, acciones y funciones. Realiza un cierto tipo de adoración, dependiendo de la forma en que glorifica a Allah a través de las manifestaciones de Sus Nombres. Ahora todas sus obras y el registro de su vida están inscritos en todas las semillas que van a resurgir en la próxima primavera en otro terreno. Con la lengua del diseño y la forma, las semillas hacen una mención elocuente de los orígenes de aquellas obras, y despliegan la página de las obras junto con las ramas, ramitas, hojas, flores y frutos. Quien dice: اِذَا الصُّحُفُ نُشِرَـتْـ es el mismo Ser Que realiza, ante nuestros ojos, estos actos sabios, que preservan, que cuidan y que son sutiles. Compara otros asuntos con ésta por analogía, y deduce la verdad si tienes la capacidad de hacerlo.
Permítenos ayudarte con lo siguiente. La aleya: اِذَا الشَّمْسُ كُــوِّرَتْ[7] se refiere a una similitud brillante y alude a su paralelismo:
Primero: Allah Todopoderoso ha corrido las cortinas de la inexistencia, del éter y de los cielos para traer desde Su tesoro de misericordia y muestra al mundo una lámpara parecida a una joya que ilumina al mundo: el sol. Después de cerrar el mundo, Él envolverá esa joya nuevamente en Sus velos y lo quitará.
Segundo: El sol puede ser retratado como un oficial de confianza con la tarea de distribuir la mercancía de luz sobre el planeta, de hacer que suceda, y, la oscuridad, para hacer que se sucedan una a la otra. En cada atardecer, el oficial recibe la orden de juntar la luz. A veces sucede también que su intercambio puede reducirse cuando está oculto por el velo de una nube. Otras veces puede ser que la luna también forme un velo y dificultar su tarea. Ahora, tal como ese oficial ha reunido sus mercaderías y su libro de contabilidad para la inspección, así también un día será despedido de sus tareas.
Incluso si no hay un motivo para su despido, hay dos lugares oscuros en el sol – ahora pequeños, pero propensos a crecer – que un día crecerán hasta el punto que el sol volverá a tomar, bajo la orden divina, la luz que ahora envuelve alrededor de la cabeza de la tierra, y la envolverá
alrededor de su propia cabeza. Entonces le dirán: “Ven, tu tarea sobre la tierra está completa. Ve al Infierno, y quema allí a aquellos que te han adorado y así se han burlado con incredulidad de un siervo obediente como tú”. Con su propio rostro oscuro y marcado, leerá el decreto: اِذَا الشَّمْسُ كُــوِّرَتْ “Cuando el sol, como un rollo, se pliegue”.
* * *
[1] Corán, 36:80
[2] Corán, 36:78
[3] Corán, 36:83
[4] Corán, 10:56
[5] Corán, 81:1, 82:1, 84:1
[6] Corán, 81:10
[7] Corán, 81:1