El Primero: A pesar de que se estudió durante dos años en detalle por las Cortes Criminales de Denizli y de Ankara y nos absolvieron y nos regresaron el libro, esta Acusación aplica a uno o dos asuntos del Rayo Cinco a un comandante que está muerto y enterrado y los muestra como si fueran ofensas tipificadas como delitos. Entonces decimos: absolutamente ninguna ley puede considerar una ofensa hacer una crítica justa y general que podría aplicarse a una persona que está muerta y enterrada y que no tiene ninguna conexión con el Gobierno.
Manipulando los hechos, la fiscalía ha tomado un aspecto de esa interpretación general y la aplicó a ese comandante. Ninguna ley puede considerarlo un crimen si encuentran el uno por ciento de un significado que se puede entender como si se refiriera a alguien en un tratado confidencial y privado. Además, el tratado expone Hadices alegóricos de manera maravillosa.
Ya que estas explicaciones se escribieron hace treinta o cuarenta años, y se han dado respuestas decisivas, que se han presentado ante otras tres cortes además de la vuestra, y ante seis departamentos de gobierno en Ankara, y no ha recibido ninguna crítica, seguramente no se las puede considerar como una variante de ninguna ley si las explicaciones del verdadero significado del Hadiz resultan adecuadas a un individuo con falencias.
Tampoco los méritos de las reformas de las que esa persona formó parte, de cuyas faltas él fue la causa, no son sólo suyos, sino que también son del ejército y del gobierno. Él sólo tuvo una parte de ellos. Así como seguramente no es un crimen criticarlo por sus faltas, tampoco se puede decir que está atacando las reformas. Además, ¿acaso podría ser un crimen no simpatizar con alguien que convirtió a la Mezquita de Santa Sofía en una casa de ídolos – a pesar de ser una fuente eterna del honor de esta nación heroica, y brillante como una joya en su yijad y al servicio del Corán, y de ser un souvenir precioso de las espadas de esta nación – y con quien también transformó la Oficina del Sheik del Islam en un colegio de señoritas?
El Segundo Asunto con el que me acusan en la Acusación:
Tres cortes legales me han absuelto sobre este asunto; y como señalé hace cuarenta años cuando esclarecía la maravillosa interpretación de un Hadiz, el Sheik al-Islam de los seres humanos y de los genios, Zembilli Ali Efendi, afirmó: “No es permisible ponerse un sombrero de ala en la cabeza, ni siquiera en broma”, y todos los Sheiks al-Islams y todos los eruditos islámicos lo consideraron inadmisible. La mayoría de los musulmanes entonces estuvieron en peligro cuando los obligaron a llevar esos sombreros (es decir, tenían que renunciar a su religión o bien rebelarse); pero ya que en una sección del Rayo Cinco, que fue escrito hace cuarenta años, dice: “Será obligatorio ponerse un sombrero de ala, y la prosternación en la oración estará prohibida, pero la fe en las cabezas de quienes lo lleven puesto harán que el sombrero se prosterne, si Allah lo permite, convirtiéndolo en musulmán”, salvó a los musulmanes de la rebelión y la revuelta, y de voluntariamente renunciar a su religión y fe; y a pesar de que ninguna ley puede proponer algo semejante a vivir en reclusión; y que en veinte años ninguna de las seis autoridades provinciales me han forzado a llevarlo; y que los oficiales en sus oficinas y las mujeres y los niños y la gente en las mezquitas y la mayoría de los pueblerinos no están obligados a llevarlo; y que ahora han sido eliminados de las cabezas de los soldados; y que en muchas provincias ahora no se prohíben las boinas y los sombreros tejidos; aún así, se ha establecido esto como un motivo para acusarnos a mí y a mis hermanos. ¿Podría alguna ley en el mundo, algún principio, algún bien, considerar este cargo completamente sin sentido como un crimen?
El Tercer Asunto con el que se me acusa: Incitar a poner en peligro la seguridad pública en Emirdag. Mi objeción es como sigue:
Primero está mi lista de objeciones, que se presentó ante la corte aquí y ante seis departamentos del gobierno de Ankara con el conocimiento y el permiso de esta corte y no se refutó. Ahora estoy afirmándolo en respuesta a la acusación.
Segundo: Como lo atestiguan todos quienes se encontraron conmigo en Emirdag y está confirmado por su gente y la policía, después de mi absolución, en mi aislamiento evité involucrarme en política con todo mi poder. Incluso renuncié a escribir y a mantener correspondencia con otros. No escribí nada además de dos partes, una sobre la repetición en el Corán, y la otra sobre los ángeles. Y solía escribir una carta por semana a un lugar para alentar a la gente sobre Risale-i Nur. De hecho, en tres años sólo escribí tres o cuatro cartas a mi propio hermano, que es un Mufti y que por veinte años estuvo conmigo como mi alumno, y estaba muy ansioso por mí, y me envió felicitaciones por las festividades religiosas. Y a pesar de que durante veinte años no he escrito ni una vez a mi hermano que está en mi región natal, me acusan de poner en peligro la seguridad y una vez más, de “oponerme a las reformas”. En respuesta decimos esto:
El hecho de que en veinte años seis cortes legales y la policía de diez provincias conectadas con el asunto no han registrado ningún incidente que involucren disturbios del orden público ni de poner en peligro la seguridad en conexión con las veinte mil o tal vez cien mil personas que leen con entusiasmo las veinte mil copias de Risale-i Nur, demuestra que considera sólo una posibilidad de miles como si fuera un hecho establecido. Pero si no hay ningún signo de nada en relación a una posibilidad de dos o tres, no puede haber crimen. Y no es una posibilidad de miles, sino que cada persona, incluyendo al fiscal me ataca, podría matar a muchas personas; podrían perturbar la paz y el orden públicos en nombre del comunismo y el anarquismo, y poner en peligro la seguridad. Es decir, es un desacato a la corte y a la ley presentar posibilidades extraordinarias y exageradas en lugar de eventos.
Además, cada gobierno tiene opositores. No es un crimen oponerse a un gobierno sólo intelectualmente. El gobierno considera la mano, no el corazón. Especialmente alguien que ha realizado grandes servicios por este país y esta nación y no ha causado ningún daño. Últimamente últimamente no tuvo ningún rol en la vida de la sociedad, sino que ha sido obligado a vivir en absoluto aislamiento, y cuyas obras se han apreciado y aplaudido en los centros más importantes del mundo islámico[1]. Me temo que quienes nivelan estas acusaciones extraordinarias y sin fundamento con esas personas sin saberlo, están siendo explotados en nombre de la anarquía, por cierto, del comunismo.
He comprendido por ciertos signos que con la idea de menospreciar a Risale-i Nur y debido a las sospechas infundadas sobre la cuestión del Mahdi, que tiene asociaciones políticas, nuestros enemigos encubiertos están investigando sugerencias completamente sin fundamento de que Risale-i Nur está siendo explotado por esto. Tal vez es por estas sospechas que me hacen sufrir estos tormentos. Les digo a esos enemigos secretos tiránicos y a quienes los escuchan con hostilidad hacia nosotros: ¡Allah no lo permita! Nuevamente, ¡Allah no lo permita! Tanto mi vida de setenta y cinco años, y en especial estos últimos treinta, y las ciento treinta partes de Risale-i Nur, y las miles de personas que me han ofrecido su amistad sincera dan testimonio de que en ningún momento he sobrepasado mi marca de esa manera ni he hecho de las verdades de la fe un medio para ganar rango, fama y renombre para mí mismo.
Sí, los alumnos de Risale-i Nur saben y he señalado pruebas de ello en las cortes que, no para ganar para mí mismo ninguna posición ni fama, ni para ganar un rango espiritual ni un elevado rango en el Más Allá, sino para servir a los creyentes con toda mi convicción y fuerza en la cuestión de la fe, estoy preparado para sacrificar no sólo mi vida en este mundo y sus rangos efímeros, sino – si fuera necesario – mi vida en el Más Allá y sus rangos eternos, que todos buscan; e incluso, para que sea un medio para salvar a ciertos desafortunados del Infierno, – si fuera necesario – renunciaría al Paraíso e ir yo mismo al Infierno. Tal como mis verdaderos hermanos saben esto, así también lo he demostrado en algunos sentidos en las cortes. Acusarme de esta manera de no ser sincero en mi servicio de Risale-i Nur y de la fe, y despreciar a Risale-i Nur y devaluarlo, privará a esta nación de sus verdades sublimes.
Si, porque ellos creen que este mundo es eterno y que como ellos mismos todos explotan la religión y la fe para este mundo, estos desdichados le adjudican motivos mundanales a alguien que desafía a todos los extraviados en este mundo, que está preparado para sacrificar sus vidas tanto en este mundo, y si fuera necesario, en el Otro; y como afirmó en las cortes, no cambiaría una sola verdad de fe por gobernar todo el mundo; y por el misterio de la sinceridad huye con todas sus fuerzas de la política y de todos los rangos, materiales y espirituales, que insinúen nada político; y ha soportado tormentos inigualables durante veinte años; y debido a su camino, no ha sido condescendiente con ninguna participación en política; y con respecto a sí mismo se refiere a sí mismo como inferior a sus estudiantes y siempre espera el esfuerzo y la oración de ellos, y cree que es un verdadero desdichado sin importancia; si por la extraordinaria fuerza de la fe que han obtenido de Risale-i Nur, algunos de sus hermanos sinceros le atribuyen a él en sus cartas privadas algunas de las virtudes de Risale-i Nur, porque él es su ‘intérprete’; y como consecuencia de una costumbre que no tiene ningún dejo político le otorgan un rango elevado – como la gente que llama a las personas comunes que aman “¡Mi señor! ¡Mi benefactor!” – y lo consideran mucho mejor que lo que corresponde; y siguen la vieja costumbre aceptable que se practica entre el maestro y sus alumnos, que no es objetable y tiene el significado de agradecimiento, y lo alaban en exceso; y escriben elogios exagerados, que por mucho tiempo ha sido la costumbre de escribir al final de los libros aceptables; si ellos hacen estas cosas, ¿se puede considerar de alguna manera esto como un crimen? Por cierto, se opone a la verdad de una manera ya que es una exageración, pero él es un extraño, está solo, tiene numerosos enemigos, y hay muchas cosas que le hacen perder a sus ayudantes. Entonces, para fortalecer su esfuerza espiritual a tantos opositores y para evitar que huyan y para no destruir el entusiasmo de quienes lo alabaron en exceso, él cambió parte de lo que había escrito para que se refiriera a Risale-i Nur y no lo rechazaran categóricamente. Se puede entender en consecuencia qué tan lejos de la verdad, la ley y la imparcialidad han llegado ciertos oficiales cuando intentan hacer que el servicio de la fe de la persona mencionada anteriormente considere este mundo, a pesar de su edad y de estar en la puerta de la tumba. Mi última palabra es:
لِكُلِّ مُصِيبَةٍ اِنَّا لِلّٰهِ وَاِنَّا اِلَيْهِ رَاجِعُونَ
Said Nursi
* * *
[1] En el octavo de los cien errores sobre estas obras en la acusación, la fiscalía dice: “Las interpretaciones en el Rayo Cinco son incorrectas”.
La Respuesta: En el Rayo Cinco, se dice: “Allah sabe más, una interpretación es esta”. Lo que esto significa es que: “Es posible que un significado del Hadiz sea este”. Lógicamente, esto no puede estar equivocado. Puede estar equivocado sólo al demostrar su imposibilidad.
Segundo: A pesar de que durante los últimos veinte años, en realidad cuarenta años, quienes se opusieron a mí, y luego quienes intentaron oponerse a Risale-i Nur, no han refutado mis interpretaciones basándose ni en la lógica ni el lo académico, y miles de personas cultas – los eruditos religiosos que se oponen a mí junto a los estudiantes de Risale-i Nur – los han confirmado, y no han dicho “lo ha golpeado el mal de ojo”, le refiero a vuestra imparcialidad el juzgar qué tan injusto es que quienes no conocen cuántas Suras hay en el Corán las encuentren con incredulidad.
En Breve: El significado de la interpretación es un significado probable o posible de un Hadiz o de una aleya Coránica de muchas otras.